La ponencia "¿Periódicos en un libro?" comienza con una mención muy especial y cargada de sentimiento por parte del moderador Antón Castro al escritor y periodista Miguel Delibes, quien falleció la pasada madrugada tras padecer una larga enfermedad.
La ponencia trata sobre los libros electrónicos y los nuevos gadgets que se están incorporando al mercado a velocidad de vértigo, tan deprisa que resultan difíciles de asimilar, y poco a poco van ganándole cada vez más terreno al libro.
Antón Castro cede la palabra al primer de los dos ponentes; Albert Cuesta, quien valora la presente situación como el final de la era Gutenberg. Cuesta considera que mediante las nuevas tecnologías hemos aprendido a comunicarnos de manera diferente, haciendo de la imprenta un instrumento cada vez más en desuso. No obstante, la muerte del formato analógico ya ha sido varias veces anunciada, y en su lugar se ha llegado a una cada vez más desequilibrada convivencia, pero convivencia al fin. El lector siente un profundo aprecio por el libro en papel, tenerlo en la mano, poder buscarlo en la estantería, pero el libro electrónico presenta muchas ventajas prácticas, como que puedes ahorrar mucho peso llevándolos todos en formato digital, además de que la lectura es igual en uno u otro formato. Albert Cuesta insiste en que lo realmente importante está dentro, y que el envoltorio es prescindible a favor de la historia, el disfrute del mismo.
A continuación nos muestra algunos ejemplos del libro electrónico como el Sony Reader, y las estrellas del mercado; el Amazon Kindle y el Apple iPad. Y nos explica ayudado de encuestas y datos concretos como el uso de estos aparatos se va incrementando.
En cuanto al mercado editorial, Cuesta opina que las editoriales se están equivocando al centrarse sobre todo en productos para el iphone, ya que se están perdiendo un mercado de lectores importantes por centrarse en una plataforma concreta.
Javier Rioyo, el segundo ponente, se encuentra de acuerdo con Cuesta en que el avance de los ebooks es evidente, aunque afirma que “sin ser resistente, todavía me seduce el objeto libro, porque tiene muchos años y creo q va a durar muchos más, porque es un formato que todavía gusta”.
Lo cierto es que, aunque la tecnología va avanzando y el uso del ebook se va extendiendo, el precio de un Sony Reader ronda los cuatrocientos dólares, por lo que aunque su uso se pueda generalizar en algún sector de la población, no toda la sociedad está preparada ni tecnológica ni económicamente para dar el paso a la lectura digital.
Las Pseudoperiodistas
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