El 1 de marzo la noticia más leída, o al menos más “cliqueada”, fue la que nos contaba la trágica muerte del mejor amigo del hombre. Esto es un suceso. Nadie puede ponerlo en duda porque ¿qué es un suceso? Algo que sucedió.
Ante esto la duda que surge es si el periodismo de sucesos va a extinguirse o no. Parece una pregunta un poco ilógica porque sucesos siempre habrá mientras viva un solo personajillo que haga algo en la vida. Llegado a este punto una cosa está clara: los sucesos tienen larga vida por delante, la pregunta es: ¿ocurre lo mismo con los periodistas de sucesos? Eso ya es otro cantar.
Una de las ponentes, Mayka Navarro (El Periódico) hizo un comentario que aunque no inmediatamente, sí provocó reacciones marcadas en la tanda de preguntas. Acusó a los jóvenes periodistas de comodones. Ante esta declaración uno de sus compañeros de mesa, Jesús Duva (El País) se apresuró a aclarar que el virus “culo pegado a la silla” contagia también a los más viajados en los caminos de la profesión. ¿Intentando suavizar el ambiente?
Tras una tanda de batallitas, que se alargaron durante toda la ponencia quitando protagonismo al tema central, finalmente se hizo mención a Internet. Ya tardaba si tenemos en cuenta que en un congreso de periodismo digital. Se mencionó la tecnología para criticarla, aunque Manuel Marlasca (Interviú y Onda Cero) luego intento desdecirse tras el avispado comentario de uno de los oyentes.
Entre todo lo que dijeron encontré algo con lo que estoy plenamente de acuerdo. En España tenemos un periodismo muy aburrido. Sólo se hace periodismo de declaraciones. Pero aquí la nota discordante, según Marlasca este periodismo no interesa a nadie. Entonces ¿por qué vende tanto? El periodimo nos guste o no es un negocio, y si algo no vende no se hace. El periodismo convocado, como se refirió a él Jaime Armengol (director de El Periódico de Aragón), se hace. Esto da que pensar ¿verdad?
Un reportero no se hace reportero buscando en Google o hablando por el móvil. Eso está. Se hace saliendo a la calle y estando con la gente. Como diría Rafael Bardají. Un reportero se hace estando en la “puta” calle. El ordenador es solo una herramienta. Muchas veces, la mejor herramienta de todas. Por algo este congreso tiene el nombre que tiene.
Como me estoy enrollando demasiado y no quiero que comencéis a bostezar, sobre todo después de la fiestecita de esta noche ¿eh?, sólo hacer mención a dos datos más que han sido repetitivos a lo largo de esta jornada.
- Dava ha dicho que los reporteros van poniéndose capas a lo largo de su trayectoria. A esta declaración me surge una duda: ¿Acaso los periodistas somos cebollas?
- Puede que el día de ayer diera lugar a recordar algo que pasó hace años en nuestro país. 11 de marzo. Pero recordarlo con tanta frecuencia me dio a entender que este tema se había convertido en un fetiche.
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